Sin embargo para el usuario que se toma en serio el rendimiento este artículo le va a demostrar como Toshiba y su equipo Portege Z30-A1310 le va a dar lo mejor de la portabilidad sin sacrificar el rendimiento real.
El diseño
Con un aspecto externo muy discreto, se presenta con un chasis de magnesio, y una estructura interna en forma de panal de abejas, añadiendo dureza, rigidez, pero manteniendo el peso bajo, esto es bueno ya que nos permite pasar desapercibidos, y nos ayuda a poder cargar el equipo en nuestra espalda más tiempo, el hecho que sea más rígido, también nos alivia ya que podemos estar seguros que no la romperemos fácilmente.
A pesar de no ser la más delgada del mercado, su grosor está a la par de la Lenovo ThinkPad X1 Carbon, dejando patente que no es el más delgado, pero tampoco el más grueso.
La pantalla
Aquí es donde viene uno de los inconvenientes de este equipo, la pantalla tiene apenas una resolución HD Ready de 1368 píxeles por 768 píxeles, lo cual nos deja atados al pasado, tomando en cuenta que está de tendencia las resoluciones HD, 2K y hasta 4K, aunque para las 13 pulgadas de tamaño no se nota mucho, la calidad de esta no es muy buena y las imágenes no se ven tan nítidas como los equipos de la competencia y de resoluciones mayores.
Los ángulos de visión se antojan como otro de los aspectos menos positivos del equipo, donde tenemos que estar casi totalmente de frente a la pantalla para poder apreciar las imágenes en todo su esplendor, pero si nos movemos un poco a los lados perderemos la referencia.
Rendimiento
Con un procesador Intel Core i5 4310u y 8 GB de memoria RAM tenemos el balance perfecto entre potencia bruta y fluidez que nos hará olvidar el mal sabor de boca de la pantalla, pero no solo esto con un disco SSD de 128 GB conseguimos la trinidad perfecta para poder sacar el máximo de provecho a nuestro entorno de trabajo.
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