Pero en este amplio mundo de la tecnología no siempre lo tradicional muere, en el caso de las computadoras de escritorio aún tienen mucha vida, el hecho que no sean tan populares no quiere decir que su mercado va a desaparecer de un día para otro, de hecho algunas ventajas clave sobre sus contrapartes móviles aún las hacen atractivas para muchos usuarios y negocios.

A pesar que los números de venta de los equipos de escritorio han ido bajando en los últimos años, estos conservan aún muchas ventajas que no deben ser ignoradas, sobre todo cuando deseamos hacer una estructura IT ya sea en nuestro negocio o en nuestro hogar.

Facilidad de reparación y actualización

Cuando tenemos un equipo de escritorio podemos reparar sus fallas de manera más sencilla, ya que su construcción modular nos permite cambiar fuentes de poder, memorias defectuosas, discos duros e inclusive procesadores y tarjetas de video.

Esto se hace clave en entornos donde debemos mantener gastos controlados, lo que nos lleva a otra ventaja, podemos mejorar el equipo al cambiar una o dos piezas, por ejemplo en el caso que necesitemos más espacio de almacenamiento y con la tendencia de las tablets o smartphones de no incluir puertos de expansión para tarjetas de memoria y en un equipo de escritorio basta con añadir un disco duro interno o uno externo sin necesidad de depender de la nube. Si lo que queremos es mejorar rendimiento, incluso un nuevo procesador puede hacer el truco por nosotros.

Seguridad física

Un equipo móvil debido a su pequeño tamaño puede extraviarse o ser robado fácilmente sin que nadie se percate, en cambio un equipo de escritorio es muy difícil de ser extraviado o sustraído de una oficina debido a sus dimensiones.

Por lo que tal vez puestos claves de una organización que no necesiten moverse mucho se pueden beneficiar de un equipo de escritorio en vez de uno móvil.

Facilidad de modificación

Este punto tiene que ver mucho con el primero, si bien hablamos de la actualización de componentes internos, el factor externo también puede ser modificado, podemos adquirir nuevas cajas donde colocar nuestros componentes internos fácilmente.

O construir cajas personalizadas con lo cual poder incorporar más discos duros o tal vez configuraciones de tarjetas de video que nos permitan desarrollar una mayor ventaja técnica.

Conclusiones

Las tendencias pueden estar cambiando los patrones de consumo y tal vez muchas cosas que antes hacíamos con equipos de escritorio las podemos hacer con nuestros móviles y tablets, sin embargo para el sector de equipos no portátiles aún queda suficiente vida.

Sobre todo cuando entramos al mundo del alto rendimiento, de la edición de videos o de las altas capacidades de almacenamiento, en esos casos no hay aún una solución móvil que ponga en jaque esas posiciones.